Se puede diferenciar la artrosis primaria, debido a procesos de la vejez y la secundaria, debida a artritis, lesiones, enfermedades sistémicas o displasias articulares y que pueden aparecer en personas muy jóvenes.
Es la consecuencia del proceso de envejecimiento, como también el roce y la carga, procesos químicos, metabólicos, genéticos, entre ellos el sobrepeso, mala postura e inestabilidad articular.
Cambio del cartílago: Disminuye el contenido de proteoglicanos, lo que conlleva un debilitamiento del cartílago, sobretodo en la parte más castigada por el peso. la central. Se crean grietas y fisuras y con la edad, suelen disminuir la altura y el revestimiento en el hueso.
Cambio en el hueso: Se crean los llamados Osteofitos, que pueden acumularse en el hueco articular. También se crea nuevo hueso (Esclerosesaum). Debajo de las superficies articulares aparecen acumulaciones císticas, (Pseudocistes), que pueden llegar a romperse.
Cambios en los tejidos blandos: La membrana sinovial y la cápsula pueden inflamarse y aumentar de grosor. Y en los ligamentos y articulaciones se puede instituir una fibrosis, a veces con calcificaciones, (Espolones).
Diagnóstico:
Aparte de la Anamnesis y la inspección, se efectua la punción articular como uno de los métodos diagnósticos más eficaces, para detectar procesos patológicos, infecciones o patologías como la artritis úrica.
Síntomas:
Dependen de la localización de la artrosis. Normalmente suelen estar más afectadas las extremidades inferiores y las manos.
Existen dolores y limitaciones de movimiento, con la carga y los movimientos, pero no en reposo. También existe rigidez con la inactividad, inflamaciones en los márgenes articulares, dolor a la palpación, crepitaciones...
Con las radiografías se puede apreciar una disminución articular, osteofitosis, como una esclerosis subcondral y pseudocistes.
Terapia:
Medicamentos contra la inflamación, fisioterapia y en casos de destrucción grave de articulaciones, se efectúa la instalación de prótesis o de placas metálicas en el caso de la columna.
Depósitos de esteroides se pueden aplicar en la articulación, conllevando alivio momentáneo en poliartritis crónica u otras artritis inflamatorias. Siempre que no exista una infección. Las complicaciones suelen ser muy raras y no se necesita un reposo después de la aplicación.
Desde el punto de vista de la osteopatía, se puede probar a hacer un deporte que me guste y a dedicarse a una alimentación más sana y equilibrada.
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