La osteopatía es una terapia holística,que requiere de las manos para la diagnosis y el tratamiento. Los fundamentos principales es considerar el cuerpo como una entidad global, su capacidad para autorregularse y autocurarse y la acción recíproca entre estructura y función.
El tratamiento osteopático tiene como objetivo corregir las restricciones de las estructuras y órganos para poder lograr el restablecimiento corporal y espiritual.
Eso se logra gracias a:
- Un diagnóstico diferencial de las limitaciones estructurales de la movilidad y sus efectos, a través de exploraciones clínicas osteopáticas.
-Reconocimiento de los distintos modelos de disfunciones.
-Una correción a través de técnicas suaves manuales, que el osteópata elige de su amplio repertorio y adaptándose a las necesidades individuales del paciente.
La osteopatía comprende un trabajo de todas las estructuras corporales: óseas, musculares, tejido conjuntivo, órganos, cráneo...
Para ello es necesario un conocimiento detallado de la anatomía, fisiología y la patología, al igual que una larga experiencia en las propiedades palpatorias.
Para mejorar la atención al paciente, se colabora con otras especialidades médicas.
No se utilizan ni medicamentos ni inyecciones.
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